VALORACIÓN DE LAS DIFICULTADES.

De dónde partimos y a dónde nos dirigimos.

Para hacer un correcto trabajo tendré que tomarme unos encuentros para entender adecuadamente la situación.

Este servicio puede que luego derive en un trabajo más en profundidad o puede que quede en una consulta puntual. Es decir, a veces podemos encontrarnos ante la necesidad de una orientación o ante una consulta que requiere un tratamiento específico: trabajo con padres, trabajo con el niño, trabajo de la pareja, trabajo con uno de los miembros de la pareja… etc

La valoración consiste en tres pasos diferenciados:

Entrevistas con padres.

Dos o tres sesiones para conocer los antecedentes, la historia del hijo, las dificultades anteriores y los intentos de resolución del motivo de consulta.

Entrevistas con el niñ@ .

Otros dos o tres encuentros para conocer en profundidad al hij@. Dependiendo de la edad realizaré un estudio que permita determinar su capacidad cognitiva, estado emocional, estado de su relación con los iguales y con los adultos y otros factores madurativos.

Devolución:

En este último momento, me encargaré de explicar claramente las razones y la propuesta de solución para el motivo de consulta. Por qué pasa eso que pasa, el camino a seguir y el pronóstico así como la periodicidad de las consultas.